1. ¡Aleluya! Alabad al Señor desde los cielos, alabadlo en las alturas;

2. alabadlo, todos sus ángeles; alabadlo, todos sus ejércitos;

3. alabadlo, sol y luna, alabadlo, todas las estrellas luminosas;

4. alabadlo, cielos de los cielos y aguas que estáis por encima de los cielos;

5. alaben el nombre del Señor, porque él lo mandó y fueron creados;

6. él los fijó para siempre jamás, puso unas leyes que nunca cambiarán.

7. Alabad al Señor desde la tierra, monstruos marinos y todos los abismos,

8. fuego y granizo, nieve y bruma, viento de tempestad que ejecuta sus órdenes,

9. montañas y todas las colinas, árboles frutales y todos los cedros,

10. bestias salvajes y todos los ganados, reptiles y pájaros que vuelan,

11. reyes del mundo y pueblos todos, príncipes y todos los jueces de la tierra,

12. jóvenes y también doncellas, los viejos a una con los niños;

13. que todos alaben el nombre del Señor, porque su nombre es sublime, sólo él; su majestad domina los cielos y la tierra.

14. Él ha realzado el poder de su pueblo, orgullo para todos sus amigos, para Israel, su pueblo íntimo. ¡Aleluya!





“Pobres e desafortunadas as almas que se envolvem no turbilhão de preocupações deste mundo. Quanto mais amam o mundo, mais suas paixões crescem, mais queimam de desejos, mais se tornam incapazes de atingir seus objetivos. E vêm, então, as inquietações, as impaciências e terríveis sofrimentos profundos, pois seus corações não palpitam com a caridade e o amor. Rezemos por essas almas desafortunadas e miseráveis, para que Jesus, em Sua infinita misericórdia, possa perdoá-las e conduzi-las a Ele.” São Padre Pio de Pietrelcina