1. ¡Tributen a Yahvé, hijos de Dios, tributen a Yahvé gloria y poder!

2. Devuelvan al Señor la gloria de su Nombre, adoren al Señor en solemne liturgia.

3. ¡Voz del Señor sobre las aguas! retumba el trueno del Dios de majestad: es el Señor, por encima del diluvio.

4. Voz del Señor, llena de fuerza, voz del Señor, voz esplendorosa.

5. Voz del Señor: ¡ha partido los cedros! El Señor derriba los cedros del Líbano.

6. Hace saltar como un novillo al Líbano, y al monte Sarón como búfalo joven.

7. Voz del Señor: ¡se ha tallado relámpagos!

8. Voz del Señor que sacude el desierto; estremece el Señor el desierto de Cadés.

9. Voz del Señor: ¡ha doblegado encinas y ha arrancado la corteza de los bosques! En su templo resuena una sola voz: ¡Gloria!

10. El Señor dominaba el diluvio, el Señor se ha sentado como rey y por siempre.

11. El Señor dará fuerza a su pueblo, dará a su pueblo bendiciones de paz.





“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina