Encontrados 201 resultados para: morada

  • Nosotros sabemos, en efecto, que si esta tienda de campaña -nuestra morada terrenal- es destruida, tenemos una casa permanente en el cielo, no construida por el hombre, sino por Dios. (II Corintios 5, 1)

  • Por eso, ahora gemimos deseando ardientemente revestirnos de aquella morada celestial; (II Corintios 5, 2)

  • En él, también ustedes son incorporados al edificio, para llegar a ser una morada de Dios en el Espíritu. (Efesios 2, 22)

  • Él es el ministro del Santuario y de la verdadera Morada, erigida no por un hombre, sino por el Señor. (Hebreos 8, 2)

  • Pero el culto que ellos celebran es una imagen y una sombra de las realidades celestiales, como Dios advirtió a Moisés cuando este iba a construir la Morada, diciéndole: Tienes que hacerlo todo conforme al modelo que te fue mostrado en la montaña. (Hebreos 8, 5)

  • Cristo, en cambio, ha venido como Sumo Sacerdote de los bienes futuros. Él, a través de una Morada más excelente y perfecta que la antigua -no construida por manos humanas, es decir, no de este mundo creado- (Hebreos 9, 11)

  • De la misma manera, roció con sangre la Morada y todos los objetos del culto. (Hebreos 9, 21)

  • En cuanto a los ángeles que no supieron conservar su preeminencia y abandonaron su propia morada, el Señor los tiene encadenados eternamente en las tinieblas para el Juicio del gran Día. (Judas 1, 6)

  • Y oí una voz potente que decía desde el trono: «Esta es la morada de Dios entre los hombres: él habitará con ellos, y ellos serán su pueblo; Dios mismo estará con ellos y será su Dios. (Apocalipsis 21, 3)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina