Encontrados 26 resultados para: consagración
Moisés la recibió luego de sus manos y la quemó en el altar por encima del holocausto. Este fue el sacrificio de consagración de calmante olor, sacrificio por el fuego para Yavé. (Levítico 8, 28)
Moisés tomó entonces el pecho y lo meció como ofrenda mecida ante Yavé; esta porción del carnero de la consagración fue la parte de Moisés, como Yavé se lo había mandado. (Levítico 8, 29)
Todo el tiempo de su consagración como nazireo, no se pasará la navaja por su cabeza; hasta que pasen los días de su consagración, será persona consagrada y se dejará crecer la cabellera. (Números 6, 5)
Durante el tiempo de su consagración no se acercará a ningún cadáver, (Números 6, 6)
aunque sea de su padre o madre, de su hermano o hermana; en pocas palabras, si a ésos les toca morir, no se hará impuro por cuanto tiene en su cabeza la consagración a su Dios. (Números 6, 7)
Esta es la ley referente a los nazireos. Cuando se cumpla el plazo de su consagración, el nazireo será conducido a la entrada de la Tienda de las Citas (Números 6, 13)
El día en que Moisés terminó la Morada, la ungió y la santificó con todo su mobiliario. Después de la consagración del altar y de todos sus utensilios, (Números 7, 1)
Yavé dijo a Aarón: "Te doy la parte que se reserva para mí de todas las ofrendas de los Israelitas. Te la doy debido a la consagración que recibieron tú y tus hijos: es una ley perpetua. (Números 18, 8)
Comenzaron la consagración el día primero del primer mes, y el día octavo del mes entraron al Vestíbulo de Yavé. Pasaron dieciocho días consagrando la Casa de Yavé. Y terminaron el día dieciséis del mes primero. (2 Crónicas 29, 17)
Los hijos de Israel, los sacerdotes y levitas y los demás que habían vuelto del destierro celebraron con alegría la consagración de esta Casa de Dios, (Esdras 6, 16)
Trajeron los vestidos de los sacerdotes, las primicias y los diezmos e hicieron venir a los nazireos que habían cumplido los días de su consagración; (1 Macabeos 3, 49)
Durante ocho días celebraron la consagración del altar, ofrecieron holocaustos con mucho entusiasmo y celebraron un sacrificio de comunión y alabanza. (1 Macabeos 4, 56)