1. Bildad de Súaj replicó, diciendo:

2. Su dominio es soberano y temible: él hace reinar la paz en sus alturas.

3. ¿Se pueden contar sus legiones? ¿Sobre quién no se alza su luz?

4. ¿Cómo puede un hombre ser justo ante Dios o ser puro un hijo de mujer?

5. Si hasta la luna no tiene brillo ni las estrellas son puras a sus ojos,

6. ¡cuánto menos el hombre, ese gusano, el hijo del hombre, que es sólo una lombriz!





“Não há nada mais inaceitável do que uma mulher caprichosa, frívola e arrogante, especialmente se é casada. Uma esposa cristã deve ser uma mulher de profunda piedade em relação a Deus, um anjo de paz na família, digna e agradável em relação ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina